miércoles, 14 de octubre de 2009

Militarizan Tucumán para quebrar la huelga de la salud


La Plata, lunes 12 de octubre de 2009. El gobernador José Alperovich habría dispuesto a 2.500 policías para intimidar a los trabajadores de la salud y vigilar sigilosamente a las mujeres que visitaron la provincia por el XXIV Encuentro Nacional de Mujeres.
Según informó el Plenario de Trabajadoras, el gobernador Alperovich, “No puede quebrar la huelga de la salud. Respondió militarizando la ciudad con 2.500 policías e intentó asustar a las mujeres y al pueblo tucumano”.
En razón de esto, afirmó el Plenario que “el jefe de Policía Hugo Sánchez entrenó a los efectivos ‘con videos e imágenes’ para ‘evitar los incidentes y actos de violencia’ que supuestamente cometieron los Autoconvocados. La policía femenina “fue la primera línea en contención” pero “también se contó con grupos masculinos”. Fue una amenaza clara de represión.
Cabe recordar que los médicos de Tucumán hace 37 días que mantienen este conflicto con el Gobierno de la Provincia en reclamo de mejoras salariales, entre las que se destacan: un incremento del 100 por ciento en la base de cálculo salarial (llevándola de 250 a 500 pesos), el pase a planta permanente de más de 5 mil contratados, el 82 por ciento móvil a jubilados y el pago del ítem por Insalubridad, entre otros puntos.
En los hospitales sólo hubo atención en las guardias, en los quirófanos de emergencia, en los consultorios para enfermedades de tipo influenza y en las salas de internación.
En respuesta a éstos pedidos el Gobernador tucumano volvió a embestir contra los autoconvocados de la sanidad, a quienes pidió "comprensión". No obstante, reiteró que no habrá aumento salarial “porque no hay dinero, no es que yo sea caprichoso, que quiera vivir en el conflicto, no quiero vivir en el conflicto, pero hay que seguir trabajando fuerte para sacar a la provincia adelante", argumentó.
Además restó importancia a las gestiones realizadas en Buenos Aires por una comisión de los Autoconvocados de la Salud, quienes denunciaron al Gobierno tucumano ante la OIT y el Ministerio de Trabajo de la Nación por violar la libertad sindical y los derechos laborales de los trabajadores. "¿Qué pueden hacer en Buenos Aires? Los problemas de los tucumanos se resuelven en Tucumán, ¿Quién puede solucionar (el conflicto) desde Buenos Aires", sentenció.
Pero no conforme con todo lo objetado, Alperovich fue por más, al referirse al paro por tiempo indefinido de los profesionales, que mantiene paralizada la atención en los consultorios externos y obligó la suspensión de numerosas cirugías programadas en las últimas nueve semanas. Cuestionó la situación afirmando que: "Se usa de rehén a los más humildes, porque el que tiene plata va al sanatorio privado y acá lamentablemente se perjudica al más débil que no tiene absolutamente nada".
En tanto el conflicto se agudizó aún más cuando los médicos recibieron sus recibos de sueldo con los descuentos por los días de paro y de quite de colaboración.
"La reducción del salario ronda el 33 % en promedio. La gente está muy compenetrada con el plan de lucha pese a los descuentos. Seguiremos con el quite de colaboración"; según informó la vocera médica del Hospital de Niños, Estela Di Cola.
Por su parte, Rubén Segovia, delegado del hospital Centro de Salud y vocero de los Autoconvocados, dijo que “seguirán dialogando y verán la posibilidad de cambiar la modalidad de las protestas desde la próxima semana, sin abandonar el plan de lucha. Advirtiendo que: “Queremos que los ciudadanos que concurren a los hospitales tengan respuesta a sus necesidades, pero también consideramos que el Poder Ejecutivo debe resolver esta situación, otorgando una mejora salarial al personal de la sanidad, porque de lo contrario las medidas se pueden endurecer”.(Portal Contacto Político)

Apoyo a los autoconvocados de la salud de Tucumán

XXIV Encuentro Nacional de Mujeres


Bajo la consigna "Por el triunfo de los obreros de Terrabusi y de los autoconvocados de la salud de Tucumán" desde la Comisión de Mujeres del Hospital Garrahan nos hicimos presentes en el XXIV Encuentro Nacional de Mujeres..

jueves, 1 de octubre de 2009








Ministerio de Trabajo. Leandro N Alem al 600...







Esta es "PREDISPOSICIÓN AL DIALOGO" con que reciben a los trabajadores en conflicto...






¡¡SOLIDARIDAD CON LOS COMPAÑEROS EN LUCHA!!





¡¡TODOS SOMOS

TERRABUSI-kraft!!



¡¡BASTA DE REPRIMIR TRABAJADORES!!



¡¡NI UN DESOCUPADO MAS!!!

“…¿A los obreros de Terrabusi? A los que elaboran las masitas? Cómo se puede reprimir a gente que hace cosas tan ricas?...(Osvaldo Bayer)

TERRABUSI-KRAFT :

160 compañeros mas, desocupados…

Pienso…¿Con qué palabras poder explicar a mis compañeros del Garrahan la importancia de defender esos puestos de trabajo?

¿En que nos puede tocar a nosotros que estamos acá, en plena Capital Federal, un conflicto que se está librando allá en zona Norte, lugar bastante alejado como para poder afectarnos directamente ¿no?...y además son “obreros”, en un hospital donde una gran parte son profesionales… cuánto puede afectarnos?…

La empresa, que deja sin trabajo a 160 familias, es una multinacional norteamericana Kraft-Food, que factura fortunas gracias a someter a los laburantes en varios lugares del planeta, a una terrible explotación.
El conflicto, que se generó hace como 40 días y que tuvo como inicio el reclamo por mejores condiciones sanitarias durante la pandemia de gripe A H1N1, tiene un trasfondo que va mas allá de ese reclamo, que es despedir el equivalente a un turno de trabajadores (tal vez 600 ó 700 personas), para implementar turnos americanos de 12 horas, que significarán mayor explotación para los trabajadores, mas desocupación y mayores ganancias para los patrones, así de sencillo.
Por supuesto, para poder hacer todo esto, no solo necesitan de un gobierno que lo avale a través de su Ministerio de Trabajo; de una burocracia sindical, la de la Alimentación con Daer a la cabeza, ex Sec Gral de la CGT durante el Menemismo, que firmó la flexibilización laboral con millones de despidos a cuesta y precarización de las condiciones de trabajo, sino que también precisa sacarse de encima a una Comisión Interna y al grupo de trabajadores, que organizarían a los obreros para resistir semejante medida.
Y es lo que han hecho.

Igual, me sigo preguntando... ¿en que les puede afectar a los trabajadores del Garrahan, que despidan obreros de Terrabusi no?

Tal vez las consecuencias más cercanas las veamos en las Historias Clínicas de nuestros pacientes.

Los desocupados, tanto los de Terrabusi, como los de tantos otros lugares, no son personas de otro planeta, no, son seres de carne y hueso, como nosotros.

Los desocupados son los padres, los abuelos, los hermanos de nuestros pacientes.

Esos 160 compañeros que se están quedando sin laburo ahora, aquí delante de nuestras narices, son 160 familias que se pueden quedar en la calle –con sus hijos- por no poder pagar el alquiler, son los futuros pacientes nuestros que la historia clínica dirá por ejemplo:

OBRA SOCIAL: NO, PADRE/PROFESION: DESOCUPADO

OTRA AYUDA: PLAN TRABAJAR, ESCOLARIDAD: NO

MOTIVO DE AUSENCIA A LA CONSULTA: NO TIENE DINERO PARA VIAJAR

MOTIVO DE AUSENCIA A LA CONSULTA: FALTA DE COBERTURA QUE LO TRASLADE etc…etc…

Pero tal vez, eso tampoco sea motivo para sentir que el conflicto de Terrabusi nos pueda afectar a los trabajadores del Garrahan.

Pienso, estoy segura, que veremos también las consecuencias un poquito más alejadas, pero ya no en “el otro”, sino en nosotros mismos.
Si estos compañeros son derrotados, estaremos más débiles todos los trabajadores del país para poder enfrentar un ajuste que SI o SI lo van a intentar hacer –en breve- con nuestros salarios, con el presupuesto de la salud, con el de educación, para hacer frente a los compromisos fraudulentos en millones de dólares que el gobierno quiere seguir pagando a costa de hambre y desocupación.

Y para muestra local: la Carrera hospitalaria, donde nos afanan la antigüedad, la letra y encima nos quieren hacer perder la estabilidad laboral que tenemos los estatales…

Pero no todo es desolación.
Nosotros, los trabajadores, tenemos sensibilidad y además sabemos practicar algo que ellos, los gobiernos y los patrones no tienen y es la SOLIDARIDAD DE CLASE: ver en el otro a uno mismo; el otro soy yo; el obrero de Terrabusi soy yo; el despido de ellos me tiene que doler como propio y tenemos que salir a defenderlo de la misma manera.
Debemos demostrarles que no se trata de unos “loquitos inadaptados de izquierda”, ni de “Terroristas”, como nos dijo a nosotros Ginés en la huelga del 2005; debemos dejar en claro que no hay que terminar con los cortes de calle en la ciudad para que se termine el “CAOS” como les gusta decir a los medios de comunicación patronales, sino que hay que terminar con la injusticia y la desocupación y no habrá más motivos para cortar las calles.

Me pregunto ¿qué haría cualquiera de nosotros si nos dejaran sin trabajo? Solo lleva un minuto pensarlo. ¿Y si encima nos reprimen mandándonos la infantería, la Caballería, Helicópteros y perros entrenados como si fueran a invadir Irak?

Seguramente nos rebelaríamos y saldríamos a defender nuestro legítimo derecho a un trabajo digno, como ya lo hemos hecho en el 2005.
Por eso, para poder seguir mirando a nuestros pacientes con la tranquilidad de haber hecho todo lo posible para que no pasen a engrosar el ejército de desocupados, llamo a solidarizarnos por nuestras condiciones de trabajo, por la dignidad de todos los trabajadores:
¡TODOS SOMOS TERRABUSI!
¡BASTA DE REPRIMIR TRABAJADORES!
¡NO PERMITAMOS UN DESOCUPADO MAS!

Mercedes Mendez (Mechi), Enfermera profesional
Hospital de Pediatría Garrahan